Cada viaje que realizamos deja una huella en el medio ambiente, pero hoy en día tenemos muchas herramientas para que sea menos impactante.
La sostenibilidad empieza por lo que decidimos llevar con nosotros: objetos simples, reutilizables y compactos que nos permiten reducir residuos y plásticos de un solo uso.
Aquí tienes una guía para preparar un kit de viaje ecológico, práctico y responsable, con soluciones concretas para quienes desean viajar con conciencia.
Botella reutilizable
El primer aliado del viajero sostenible es la botella reutilizable.
Elige una de acero inoxidable o vidrio de borosilicato: dura mucho tiempo, no altera los sabores y evita el uso constante de botellas de plástico.
En los países donde el agua del grifo es potable, puedes rellenarla fácilmente en hoteles, estaciones y fuentes públicas.
Como alternativa, opta por una botella con filtro incorporado, ideal para viajar a zonas donde el agua no siempre es segura.
Puedes encontrar puntos de recarga con aplicaciones como Refill.
Cosméticos sólidos
Los champús y geles sólidos no solo reducen drásticamente el uso de plástico, sino que son perfectos para viajar: ocupan poco espacio, no se derraman en la maleta y duran mucho más que los productos líquidos.
Muchas marcas también ofrecen acondicionadores, desodorantes, pastas de dientes y perfumes en formato sólido, a menudo en envases compostables o en latas metálicas reutilizables.
Hay excelentes opciones disponibles de marcas como Lamazuna, Lush, Officina Naturae, Ethical Grace y otras iniciativas ecológicas.
Cepillo de dientes de bambú y pasta dental en tabletas o crema sólida
La higiene bucal también puede ser más sostenible.
El cepillo de dientes de plástico tradicional puede sustituirse por uno de bambú compostable o con cabezales intercambiables.
La pasta dental existe en tabletas, crema sólida o polvo, todas en envases reutilizables o recargables.
Son ligeras, aptas para el avión y muy prácticas para viajar.
Toalla de microfibra reciclada: ligera y de secado rápido
Una toalla de microfibra es útil en la playa, acampando o incluso solo para la ducha en un hostal.
Las versiones fabricadas con tejidos reciclados, como las de Nomadix o Sea to Summit, son ligeras, se secan rápidamente y ocupan muy poco espacio al doblarlas.
Además, resultan más higiénicas que las toallas tradicionales en caso de uso frecuente.
Recipientes de silicona plegables para comida y tentempiés
Cuando viajamos, es habitual comer fuera o llevar algo para picar.
Los recipientes de silicona alimentaria plegables son ideales para guardar sobras, transportar comida o evitar envases de un solo uso.
Son ligeros, lavables y reutilizables una y otra vez.
Se pueden acompañar de un utensilio multifuncional (como un tenedor-cuchara) o de un pequeño set de cubiertos de bambú, perfectos para excursiones o comida callejera.
Jabón de Marsella sólido: multiusos y natural
Un clásico de la sostenibilidad, el jabón de Marsella sólido, mejor si es ecológico y sin perfume, puede usarse para lavar las manos, el cuerpo, el cabello, la ropa e incluso los platos.
Es económico, sólido y muy duradero.
Un solo producto con múltiples usos significa llevar menos peso y generar menos residuos plásticos.
Bolsas de algodón o de red para compras o ropa
Una bolsa de tela puede tener muchos usos durante un viaje: para las compras, la ropa, la comida o incluso como organizador de equipaje.
Elige modelos de algodón orgánico o de malla transpirable.
Algunos son tan ligeros y compactos que caben en la palma de la mano y te evitan el uso de bolsas de plástico.
Detergente ecológico de viaje para lavado a mano
Quienes viajan durante varios días, especialmente de forma itinerante, pueden llevar un detergente ecológico concentrado en formato mini.
Algunas marcas ofrecen botellas recargables con fórmulas biodegradables (por ejemplo, Greenatural, Sonett, Almacabio).
También existen hojas monodosis solubles o jabones sólidos específicos para el lavado a mano.
Power bank solar y cargador universal
Incluso la electrónica puede ser más sostenible.
Un power bank solar permite cargar el móvil u otros dispositivos durante acampadas, excursiones o viajes al aire libre.
No siempre tiene mucha potencia, pero puede resultar útil como solución de emergencia.
Se puede complementar con un cargador USB multipuerto, útil para reducir la cantidad de adaptadores necesarios.
Guías, libros y billetes en formato digital
Muchas guías turísticas —como las de Lonely Planet— y apps de navegación como Maps.me o Komoot están disponibles en formato digital y se pueden consultar sin conexión: una forma práctica de ahorrar batería y datos durante el viaje.
A quienes les gusta leer, un e-reader les permite llevar decenas de libros y guías sin añadir peso al equipaje.
Los billetes y documentos de viaje están cada vez más disponibles en formato digital. La mayoría de aerolíneas, trenes y museos ya permiten guardar los tickets directamente en el móvil, mediante apps oficiales o carteras digitales, evitando la necesidad de imprimir.
Viajar de forma sostenible no significa renunciar a la comodidad, sino elegir con atención lo que llevamos en la maleta.
El kit de viaje ecológico ayuda a reducir residuos, plásticos de un solo uso y el peso del equipaje, mejorando la experiencia y respetando los lugares que visitamos.
Prepararse con conciencia ya es el primer paso hacia una forma de viajar más ética y respetuosa con el medio ambiente.